Quiero compartir algunas reflexiones sobre dos temas importantes. El primero sobre el cielo, el infierno y la vida eterna. El segundo sobre la piratería y los derechos de autor. A través de las palabras presento parte de mi postura frente a estos temas tan controversiales hoy día. Por favor, tómate tu tiempo para meditar.

Este es el primero de mis temas.

El cielo existe o no existe. El infierno existe o no existe. Yo creo que existen, Dios me lo enseña en la Biblia. Pero digamos que tu no crees que exista el infierno, ni el cielo, ni la vida después de la muerte, entonces tu te mueres y si tienes razón, no pasa nada. Todo se acabó con tu funeral. Pero digamos que yo tengo razón y la Biblia es la verdad, entonces, cuando te mueras, ¿a dónde irás a parar?

Este es el segundo tema.

«Si hay algo que tiene que comprender el usuario de internet que ama la música, que ama el cine o la literatura es que toda obra creativa o artística tiene un dueño legítimo que la ha construido con sudor, dolor y pasión, y no puede obligarse a ese creador a regalar su obra, simplemente porque lo han vencido las mañas y la astucia de quienes ejercen el manejo del espacio digital. Es una obligación moral de los proveedores de los servicios de internet y de los usuarios respetar esa propiedad intelectual y legítima del artista». Jorge Franco.

Ten siempre presente que no es correcto descargar música, libros, o cualquier otro tipo de material sin pagar, a menos que el mismo autor lo haya permitido y eso sea expresado explícitamente. Por favor, acabemos la piratería. Es un crimen, un pecado y una práctica que deja a muchas personas sin trabajo. Seamos cristianos. ¡Paguemos lo que valen las cosas!